Soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, asà también hacedlo vosotros. (Colosenses 3:12-13)Soportándoos unos a otros quiere decir âresistir, perdurar a pesar de la persecución, de las amenazas, de los agravios, de la indiferencia y de cualquier mal, sin buscar vengarseâ. Esta actitud caracterizó a Pablo, quien les dijo a los corintios: ânos maldicen, y bendecimos; padecemos persecución, y la soportamosâ (1 Co. 4:12). Sin embargo, no fue una cualidad que caracterizó a los corintios, que se acusaban unos a otros ante la justicia. Pablo exclama: â¿Por qué no sufrÃs más bien el agravio? ¿Por qué no sufrÃs más bien el ser defraudados?â (1 Co. 6:7). Los creyentes deben ser pacientes (Ef. 4:2). Ese fue el ejemplo de los tesalonicenses, de quienes Pablo escribió: ânosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, por vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis [anexomai, la misma palabra usada aquà en 3:13]â (2 Ts. 1:4). . . .